Hay muchas formas de conseguir minimedallas: si exploras los escenarios a fondo encontrarás bastantes objetos rompibles que soltarán minimedallas, o cofres que las contienen. También son recompensa de varias misiones secundarias. Pero lo más sencillo, es farmearlas en el Post-Game robándolas a unos monstruos en concreto:
- Este farmeo sólo puede realizarse en el Post-Game, y tienes que haber llegado hasta Isla Prueba.
- Entra en la Primera Prueba: Prueba del Discípulo. Nos interesa quedarnos en la primera zona, la Cripta Cruel.
- Avanzamos y nos dejamos caer al piso inferior. Podemos robarles minimedallas a los enemigos tragaperras que hay por la zona.
- Cuando acabes con todas, usa el Corcel Esqueleto para volver al piso superior, y buscamos a los enemigos Umbras, ya que también les podemos robar minimedallas.
- Cuando acabes con los Umbras, puedes volver al piso inferior, porque las tragaperras habrán vuelto a aparecer. Lo mismo ocurrirá con los Umbras; estarán de nuevo cuando acabes con las tragaperras.
Otra opción sería, tras completar una de las pruebas de Isla Prueba pedir como recompensa una carrera de caballos de alto nivel. Así, aparecerá en las carreras de caballos de Galópolis una nueva carrera bajo el nombre de Copa Negra. Lo bueno de esta carrera es que, por participar, siempre conseguirás una minimedalla, sin importar la posición en la que quedes. Sin embargo, me parecía más rápido el farmeo.
En realidad no podemos parar hasta llegar a 90 minimedallas, ya que en L’Académie nos darán como recompensa un libro de recetas necesario para el trofeo 
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